viernes, 3 de agosto de 2012

UNA NOCHE NO BASTÓ



En fin, una noche no bastó y el tiempo rápido transcurrió para que en tan sólo unas horas la calidez de la luna nos buscara, encontrara y refugiara bajo el manto obscuro del cielo amable que nos contempla. 

De ese modo, si hasta los astros nos dirigen y nos encuentran en un lapso pequeño de tiempo, debo agradecer al destino que, aún en la distancia, construye sin medida alguna un sin límite de ocasiones para hablarte, interrumpirte y robarte el sueño una vez más...

No hay comentarios:

Publicar un comentario